La semillas de chía (Salvia hispánica) es originaria de centro América, han sido consumidas desde hace siglos. En la actualidad es muy apreciado por su alto contenido en Omega 3, proporcionalmente mayor cantidad que los aceites de pescados y libre de metales pesados.
Las semillas de chía contienen mucha fibra alimentaría, soluble e insoluble y mucílagos, que facilitan el movimiento del intestino. Esto ayuda a mantener una buena flora intestinal y a luchar contra el estreñimiento y los problemas asociados a él.
Modo de empleo: Ingerir una cucharada por la mañana y otra por la noche. Puede tomarse diluida en agua, o yogur, cereales fruta, zumos. Se recomienda dejar 30 minutos en agua después de haberse diluido en agua para que forme un gel y después ingerir, para favorecer su digestión y asimilación.